Para frenar un desalojo, la ACIJ se presentó como “Amicus Curiae”
“Un desalojo en esta instancia dejaría en situación de calle a las personas que residen en la casa”, señalaron desde la ACIJ.
Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia, con la finalidad de evitar un desalojo a 106 familias, se presentó como “Amicus Curiae”.
El desalojo fue establecido para los días 18, 19 y 20 de septiembre, por lo que la Asociación Civil solicitó que no se realizara; por tal motivo es que se presentaron como “Amicus Curiae”, ante el Juzgado Nacional Civil Nº 60. Además, se desaloja a estas familias sin que se les brinde una solución habitacional.
Lo que intentan, es frenar el desalojo de 106 familias de la “Casa Santa Cruz” ubicado en la calle Santa Cruz 140, en el Barrio Porteño de Parque Patricios.
Las 106 familias representan 350 personas, entre los que se encuentran 131 niños y adolescentes.
La ACIJ indicó que “Un desalojo en esta instancia dejaría en situación de calle a las personas que residen en la casa, violando su derecho a acceder a una vivienda adecuada, reconocido por la Constitución Nacional, la Constitución de la Ciudad y múltiples tratados internacionales de derechos humanos, con jerarquía constitucional, al igual que otros DDHH, como seguridad e integridad física, educación, trabajo, salud, etcétera”. Y además señalaron que “Por todo esto, desde ACIJ nos presentamos como ‘Amicus Curiae’ pidiendo que se suspenda el desalojo hasta tanto se logre arribar a una solución habitacional colectiva y consensuada para las personas que habitan el inmueble y que se conforme una Mesa de Trabajo en el ámbito del Juzgado para resolver el conflicto”.
Por otro lado, los vecinos del edificio comentaron que a pesar que el desalojo es inmediato, ya que está estipulado para hoy, ellos van a resistir.
Antiguamente en el inmueble funcionaba una empresa textil llamada SELSA, por lo menos en la década de 90. Después que la fábrica estableciera su quiebra, quedó totalmente abandonada, hasta que un conjunto de familias que se hallaba en situaciones de absoluta vulnerabilidad se fue instalando allí. Este proceso comenzó a partir del año 2002. Poco a poco fueron haciendo arreglos para poder dejar el predio en condiciones habitables, y pagando los servicios del edificio.
Además, en el año 2010, las familias que viven en el lugar, intentaron comprar la casa, para lo cual se presentaron en la subasta pública, pero finalmente fue comprada por el empresario Leonardo Ratuschny.
Dado que ahora el nuevo dueño es el empresario, es que se solicita el desalojo del inmueble.
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