La Ciudad avanza en la profesionalización del cuidado gerontológico
En un paso significativo hacia la profesionalización del cuidado de las personas mayores, el Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires formalizó el Registro de las Unidades Formadoras de Asistentes Gerontológicos. Esta medida, impulsada por la Secretaría de Bienestar Integral, busca acreditar las instituciones y homologar sus cursos, consolidando así la calidad del recurso humano dedicado a esta labor.
Desde su creación en agosto del 2023, en consonancia con la Ley 5671, este registro ha sido una prioridad en la agenda de la Ciudad, en su compromiso por mejorar la calidad de vida de los adultos mayores. Victoria Morales Gorleri, Secretaria de Bienestar Integral del Gobierno porteño, enfatizó la importancia de este avance: “Hemos dado un salto con el Registro de Unidades Formadoras, lo que les va a permitir a muchas más personas acercarse y formarse en los cuidados hacia las personas mayores”.
Asimismo, Morales Gorleri destacó la relevancia de este paso en el contexto demográfico actual: “Un 37 % de nuestra población tiene 60 años o más y tenemos la necesidad de formar profesionales que puedan acompañar este proceso”. Esta cifra subraya la urgencia de contar con un personal debidamente capacitado para atender las necesidades específicas de este segmento de la población.
Las Unidades Formadoras, que desempeñan un papel fundamental en la formación inicial y continua de los Asistentes Gerontológicos, ahora cuentan con un respaldo oficial que garantiza la calidad de su enseñanza. Entre las 48 instituciones reconocidas se encuentran nombres destacados como AMIA, la Cruz Roja Argentina, y la Universidad de Buenos Aires, entre otras.
Desde el año 2016, la Ciudad ha trabajado en estrecha colaboración con estas unidades, con el objetivo de mejorar la oferta formativa en el ámbito gerontológico. En palabras de Morales Gorleri: “Desde nuestra Secretaría estamos trabajando para acompañar y propiciar el bienestar de nuestras personas mayores”.
En este sentido, el Registro de Unidades Formadoras representa un hito importante en el camino hacia una atención integral y especializada para la población de adultos mayores. La profesionalización del cuidado gerontológico no solo beneficia a los pacientes, sino que también eleva el estándar de calidad de vida de toda la comunidad.
La consolidación de este registro es un ejemplo del compromiso continuo de la Ciudad con el bienestar de sus ciudadanos mayores. Este paso adelante no solo fortalece el sistema de atención gerontológica, sino que también brinda nuevas oportunidades de formación y desarrollo profesional en este campo crucial para la sociedad.
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