Bomberos porteños completaron el Curso de Respuesta Técnica en Emergencias con Materiales Peligrosos
Del 2 al 13 de diciembre, el Cuerpo de Bomberos de la Ciudad llevó a cabo la tercera edición del curso especializado en emergencias químicas, biológicas, nucleares y radiológicas (QBNR). Esta capacitación buscó preparar a los agentes para enfrentar situaciones de alta complejidad con víctimas múltiples y materiales peligrosos.
Durante dos semanas, los participantes del curso “Operador de Respuesta Técnica en Emergencias con Materiales Peligrosos” adquirieron conocimientos avanzados en la gestión de situaciones químicas, biológicas y radiológicas. La capacitación incluyó desde aspectos teóricos hasta simulaciones prácticas diseñadas para recrear escenarios reales en los que los operadores deben actuar con precisión y rapidez.
Entre los temas abordados, se destacaron las maniobras de control y mitigación, el uso de herramientas específicas como kits de obturación y equipos de monitoreo, y la planificación operativa para emergencias complejas. “El curso se enfoca en dotar a los bomberos de habilidades técnicas que van más allá del combate tradicional de incendios”, explicaron desde el cuerpo de Bomberos.
A diferencia de otras intervenciones, las emergencias con materiales peligrosos presentan características únicas, como la necesidad de evaluar riesgos toxicológicos, la correcta identificación de vías de ingreso de sustancias al organismo y el uso adecuado de equipos de protección personal (EPP). Para ello, los bomberos utilizaron trajes encapsulados de nivel A, diseñados para protegerlos en entornos de visibilidad y sensibilidad reducidas, donde el estrés térmico es un factor constante.
Además, los participantes estudiaron casos reales ocurridos en la Ciudad y otras localidades, tanto nacionales como internacionales, para aprender de experiencias previas y aplicar criterios mejorados en la evaluación de riesgos.
La formación incluyó ejercicios en terreno que reprodujeron emergencias como derrames químicos, incidentes biológicos y escenarios nucleares radiológicos. Los bomberos pusieron en práctica protocolos de respuesta técnica, considerando que en este tipo de intervenciones el agua no siempre es el recurso principal para mitigar los incidentes, como sí sucede en los incendios urbanos.
“Nuestro trabajo requiere un enfoque técnico especializado, ya que enfrentamos situaciones de alta complejidad que demandan rapidez, precisión y una preparación exhaustiva”, destacó un instructor del curso.
Para participar en esta capacitación, los bomberos deben haber aprobado previamente el curso de Primer Respuesta en Materiales Peligrosos, que les permite avanzar hacia este nivel técnico. Una vez completada la formación, los operadores estarán preparados para proteger vidas, bienes y el medioambiente en emergencias que involucren materiales peligrosos, una tarea que requiere alta precisión y compromiso.
Este curso reafirma el compromiso del Cuerpo de Bomberos de la Ciudad en mantenerse a la vanguardia en la preparación ante emergencias de alta complejidad, contribuyendo así a la seguridad de la comunidad porteña frente a riesgos extraordinarios.
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