Por MM
Los índices de inseguridad en la Ciudad eran altos y relativamente parejos en algunos barrios. Incluso aquellos barrios que parecían inmunes a la inseguridad comenzaron a ver amenazada la tranquilidad de la zona.
El caso del barrio de Boedo, es un claro ejemplo de ello. Sin embargo lejos de quedarse en la quietud comenzaron a unir fuerzas para combatir la ola de inseguridad que los asechaba desde fines de 2016.
Así, el grupo de vecinos que conforman Boedo de Pie en colaboración con la ONG La Alameda lograron remover la Cúpula de Seguridad de la Comuna, supuestamente involucrada en los hechos delictivos denunciados.
Hoy el trabajo de control, allanamiento e inspecciones continúa realizando un trabajo de limpieza delictiva en la zona.
Boedo es uno de los barrios que supo ponerse de pie para hacer frente a la cuestión de inseguridad barrial.
A la Clausura de dos talleres clandestinos el mes pasado se le suman la reciente clausura de un prostíbulo ubicado en la calle Carlos Calvo casi esquina Boedo. En dialogo con NuevoCiclo, fuentes oficiales indicaron que se encontraban en el lugar mujeres de procedencia argentinas y dominicanas.
Según trascendió, el lugar funciona desde hace más de 10 años. A pesar de las reiteradas denuncias el prostíbulo continuaba en funcionamiento con total impunidad hasta que hace unas semanas llegó la orden de allanamiento y con ello la clausura del lugar. Con ello se cerró una parte de la historia de corrupción, omisión y complicidad que mantenía la Comisaría Décima con sus autoridades anteriores.
La movida barrial además logró la Clausura del Local Bailable de la Avenida La Plata conocido como Phuket. Este espacio nocturno tenía varias denuncias por violencia, venta de alcohol e ingreso a menores. Sin embargo y a pesar de los reclamos vecinales de la zona el local continuaba funcionando.
En 2015 un adolescente fue asesinado en la intersección de Independencia y Av La Plata. Phunket estaba involucrado. Sin embargo la causa quedo parada.
La Violencia, la corrupción y la ilegalidad iban de la mano con el local nocturno. Hoy después de muchos años sus puertas cerraron.
“Hemos observado, un aumento significativo de controles en la zona contra hechos delictivos respecto a la gestión anterior. Creo que esto es merito de los vecinos que se movilizaron crearon Asociaciones como Boedo de Pie y buscaron aliados en la Iglesia y la Alameda” contó Lucas Schaerer, el dirigente de la Alameda.
Boedo es un claro ejemplo que la unión hace la fuerza. Movilizaciones barriales en concordancia con las Instituciones educativas y religiosas de la zona, denuncias penales en la Legislatura Porteña que acabaron con la destitución del Comisario de la Décima, y la colaboración con la Fuerza de Seguridad en el armado del Mapa del Delito que facilitó la labor policial son algunas de las acciones que marcaron la distinción de Boedo respecto a otros barrios que se mantuvieron en la quietud ante el asecho de la inseguridad.
Si bien la ola de inseguridad continua sacudiendo a toda la Ciudad, el barrio de Boedo encontró la forma de intensificar los controles policiales y garantizar mayor seguridad que la vivida hace unos meses atrás.
Hoy las reuniones de los vecinos continúan, el dialogo abierto para plantear situaciones también.
“La presión que ejercieron los vecinos de Boedo fue capaz de llegar hasta la Legislatura que se vio obligada a tomar medidas espasmódicas “manifestó Schaerer.
Una vez más Boedo, ejemplo de organización barrial, más allá de sus defectos generales.
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