BOEDO ARTE SUR
Como todos los meses, el segundo martes de agosto se realizó la vernisage de la exposición de Liliana Alonso en el bar “Esquina Sur”, de San Juan 3606. Talentosa artista, Liliana ya nos había deleitado con sus obras el año anterior, cuando expuso por primera vez en nuestro espacio.
Esta vez, con sus obras geométricas, llenó el local de formas y colores. La presentación estuvo a cargo de la presidente de la Junta de Estudios Históricos de Boedo, que le cedió la palabra a la señora Isabel Merellano, quien junto a Norberto Pagano hicieron la crítica formal de la muestra, que aquí transcribimos:
Estamos reunidos en esta casa que nos abre sus puertas gracias a la gentileza y generosidad del Sr. Alberto Domínguez. Es para celebrar el espíritu de las formas en un ambiente de expectativa cierta-es la expectativa que conocimos hacia fines del año pasado- A medida que Liliana Alonso desarrolla su obra, se afirma y crece.
En esta ocasión observamos el litigio secular entre figura y fondo. Ya en 1910 se consumó la ruptura con la perspectiva renacentista, respetado desde el S. XV como el único procedimiento para representar las 3 dimensiones del espacio sobre una superficie plana. Se llegó a esta situación no por una posición teórica sino como consecuencia del trabajo de los pintores.
Nace así el cubismo cuyos exponentes ( Braque, Picasso, etc) al estudiar los volúmenes daban cada vez mayor importancia a los planos que los limitaban, y esta independencia cada vez mayor de los planos comienzan a ser estudiados por sí mismos y no en función del volumen, convirtiéndose éstos en elementos autónomos de representación.
El cubismo despoja a las formas de su realidad transitoria y las coloca en su pureza geométrica, en su verdad matemática. Este despojar a las formas de los elementos aparenciales sensibles constituye el principio de la operación que llevará a la abstracción geométrica y racionalista.
Liliana Alonso es racionalista. Si bien en sus comienzos transitó por la figuración, exploró distintas técnicas y en su afán de aprendizaje y superación ninguna postura estética le es indiferente. Y poco a poco se ha ido perfilando un estilo ascético de planos que se equilibran armoniosamente buscando siempre la precisión entre las partes. Blancos y negros dialogan en armonía- El color es el elemento sensorio que agrega otra dinámica a la obra.
En fin, la línea recta ya horizontal, ya oblicua o vertical es la que nos introduce en un mundo de formas puras.
Nos gusta su pintura. Es audaz. Nosotros le auguramos a Liliana satisfacciones en esta tarea de expresar la otra realidad, la que no se ve.-
La presentación cerró con la entrega a la expositora del diploma oficial de la Junta, bellamente fileteado por el maestro Luis Zorz, el cual acredita su paso por este espacio cultural. El cierre, como siempre, fue con un brindis y unas ricas pizzas compartidas por los amigos de la artista, y los miembros de la Junta que estuvieron presentes acompañando el acto y gracias a la generosidad del Sr. Alberto Domínguez, propietario de “Esquina Sur”.
(136)