Norma de Vita, Una Artista Para Todos
Entrevista exclusiva a una destacada pintora, escultora, docente, y como si esto fuera poco, vecina del querido barrio Boedo. De cómo el arte puede hacerse cercano, de tan humano transformador personal, y al alcance de todo aquel que se sienta tocado por su mensaje.
El sol entibia la primeras horas de la tarde de un martes de principios de agosto, tres en punto, toco el timbre “equivocado” con la emoción del encuentro. No todos los días se tiene la oportunidad de entrar, “con permiso, por supuesto”, a un universo artístico pleno. Es el reino de Norma, una mujer amigable de falda violeta y con la mirada clara, expectante y generosa, quien nos abre la puerta. Dispuesta a recorrer, palmo a palmo, la geografía de su creación.
Admiradora de Beethoven, se puede apreciar un retrato impactante, creado a partir de una máscara-nos comenta-, también disfrutamos de otro cuadro sobre Tango, ambos conviven armónicamente sobre una de las paredes principales de la sala donde comenzamos el reportaje. Compartimos algunos de sus pasajes más salientes.
NC: ¿Cómo y cuándo te descubriste cómo artista plástica?
NdV: A los tres, cuatro años, cuando ví la Basílica de San José de Flores, ubicada en Avenida Rivadavia 6950 de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Nos comenta que esta obra de una belleza arquitectónica única, fue realizada por iniciativa de Monseñor Feliciano de Vita, hermano de su abuelo. Monseñor De Vita se desempeñó como párroco de la Iglesia, sus restos descansan a la entrada de la Basílica.
Así fue cómo comencé a sentir la necesidad de expresarme, dibujaba y dibujaba. Esta necesidad continúo hasta los 14, 15 años, cuando me deslumbró una escultura al poeta escritor Carlos Guido Spano.
NC: ¿Algún recuerdo de la infancia que quieras mencionar, que pueda haber influído en tu Obra?
NdV: Nací en el Hospital Piñeiro. Me crié y viví en Villa Luro cerca de treinta años aproximadamente. Un barrio, en aquel entonces, de casas cuidadas con muchos metros de fondo en algunos casos. Donde todos los “viejitos” de la cuadra se transformaban en abuelos postizos. Cómo no recordar a Don Rey, un vecino, cuando cantaba tangos con un énfasis tan especial: ¡Inolvidable!
NC: ¿A quiénes reconoces como tus Maestros de Arte?
NdV: A Corinto Trezzini, por ejemplo, “Me abrió los ojos”…Otros profesores significativos en mi formación han sido y de alguna manera lo siguen siendo: Rodolfo Castaña, Germen Gelpi, Araceli Vazquez, Alejandro Tomattis, Arquitecto Maestro Williams.
NC: ¿Cómo definirías tu estilo?
NdV: Metafísico, simbólico. Utilizo óleo para pintar y cemento para esculpir. Para crear elijo la soledad y el tiempo. Amo mi trabajo que realizo con un gran placer.
NC: ¿Cuál ó cuáles son los temas qué te inspiran?
NdV: El ser humano, la vida, en su dimensión terrenal y espiritual. Por momentos, intento ser como una voz de los que no tienen la posibilidad de dar a conocer lo que están padeciendo. Un ejemplo, la Obra “Hasta Cuándo” basada en Malvinas, 1982. Estímulo Bellas Artes. Entre otros títulos destacamos: “El Ciclo de la Vida”, “Mis Presencias”, “Sostener ó el Fin”…ó “Rumy”…En escultura compartimos “Vida”, “Liberación” entre otras piezas de gran intensidad expresiva.
Norma recuerda con emoción a quién fuera su esposo, un gran compañero de toda la vida, Oscar Máximo Quatrocchi, pintor, escultor en metal. Juntos inauguraron en Villa del Parque, un Centro Artístico Cultural, pionero en su estilo y para todas las edades. Artes Plásticas y Literatura, con talleres dedicados a los más chicos, con actividades inclusive, durante el fin de semana. Todo un proyecto cultural, participativo, sobre la base del compartir y no en el competir, valores que hacen a la solidaridad, a la paciencia, al aprender, a la humildad.
NC: ¿El arte puede transformar una sociedad?
NdV: El arte puede transformar a una persona, ayudarla. Enseñarle otra manera de ver y de sentir. Compartir y con competir…
Hoy y ya desde hace algún tiempo, el arte se encuentra desvalorizado, con la idea de que todo es expresión artística…En una sinfonía, no sólo es importante lo que se transmite sino cómo se transmite, qué lenguaje se utiliza. No todo es arte, insisto. El Artista crea, recrea, otra actividad podría ser un reproductor que sin el modelo, no existiría.
NC: ¿Además de dedicarte a la docencia de pintura para adultos, existe algún proyecto a mediano plazo que te interese compartir?
NdV: Sí! Es una idea todavía. Será bienvenido el apoyo concreto que haga posible que esta Casa se transforme en Museo. Con sus Cuadros, Esculturas, Libros, todo a disposición de quienes quieran acercarse. Amo Boedo, mi Barrio, tal vez hoy en día, me gustaría encontrar en él más diversidad.
Así es Norma de Vita, una auténtica artista, que transitando los 83 años, nos invita a seguir adelante y a pintar la vida desde una mirada plural.
Nancy E. Castellanos
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