Un caso extraño sucedió en España, en un pueblo llamado Gósol, ubicado en la rica región autónoma de Cataluña, todo el pueblo entero se salvó por la Pandemia
Había 140 habitantes, pero todo empezó a modificarse cuando empezó a expandirse el virus.
En este pueblo tan pintoresco vivió Pablo Picasso: llegó, en 1906 cuando la población era de unos 745 habitantes. El artista pintó gran parte de su famoso “Período rosa” allí, aprovechando lo que definió como una “epifanía de inspiración”. Luego de ese tiempo el artista se marchó del pueblo.
En ese momento, había disminuido la cantidad de habitantes, la escuela estuvo a punto de cerrar por falta de alumnos, el mandatario del lugar visitó los programas de televisión y les suplicó a sus compatriotas: “Vengan a Gósol o el pueblo desaparecerá”. Al parecer, fue necesaria una pandemia para que los españoles le prestaran atención a su llamado. Con el inicio de la pandemia, muchos barceloneses comenzaron a mirar hacia afuera, y mucha gente debido a la crisis económica que vivía España en ese momento, fueron al pueblo, y también por el covid-19 fueron en busca de un lugar seguro y llegaron a Gósol.
Unas 20 o 30 personas se mudaron al pueblo, donde incluso la pequeña escuela ubicada en la plaza del pueblo recibió una segunda oportunidad cuando los padres comenzaron a inscribir a sus hijos, ahora tiene 16 estudiantes, con sillas y mesas para niños.
Josep Tomás Puig, de 67 años, cartero jubilado de Gósol, comentó “Si no fuera por el coronavirus, la escuela se hubiera cerrado, Si se cierra la escuela, se cierra el pueblo”.
Anna Boixader, una maestra del pueblo relató que “Hay una niña, hay dos o tres, que se han vuelto mucho más cerradas, que les cuesta más relacionarse con los otros,” “Es como que se han acostumbrado estos meses a estar solas.”
Solo tres familias se mudaron a Gósol en los años previos a la pandemia. Pero el año pasado, una tormenta invernal dejó a la ciudad sin electricidad, y a muchos sin calefacción, durante dos días y dos de las tres familias que se ofrecieron como voluntarias para mudarse finalmente se fueron del lugar.
Este no fue el primer pueblo del país en llegar al borde de esa situación, La “España vacía” es la frase que se acuñó para describir ese problema. Este movimiento de población de los pueblos a las ciudades lleva provocando durante años que amplias regiones de la península queden despobladas con densidades que compiten en los ránking europeos con Laponia Noruega.
Los residentes no saben si este movimiento en su pueblo será permanente o no, pero por ahora, Gósol vivirá para ver otro día: “una pequeña victoria en un año por lo demás desgarrador, pero una victoria de todos modos.”
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